5 de mayo de 2010

Más atrevida a un 'click'

Cristina hizo una lista con su enamorado de lugares en los que querían tener relaciones. Esa tarde la revisaron y tuvieron un llamado 'rapidito' en un ascensor cuya pared posterior era de vidrio. Si los vieron o no, ella no lo sabe, ni parece importarle, lo que sí sabe es que con otra persona no lo hubiera hecho jamás.


Si antes era extremadamente recatada no lo sé, pero su historia llegó a mis oídos una tarde de abril (oh qué romántica). Bueno el asunto es que me pregunté por qué con unas personas somos más atrevidas, que con otras... Por qué hacemos cosas, que antes juraríamos no íbamos a intentar.

Pero como en este blog, no se escribe lo que yo pienso sino las opiniones de varios consultados, les cuento que todo se resume en un 'click'.

Si no haces 'click' con esa persona tu relación podría caer en la rutina. No estoy hablando de un simple gusto físico, es realmente otro nivel de atracción sexual, uno que hace que disfrutes tanto de tu pareja, que te hace pensar qué hacer luego para complacerla, divertirte y lo que te puede llevar a cada día ser más audaz.

Un encuestado coincide que también es un asunto de comodidad y con esto no me refiero a que tengas relaciones en una cama exquisita, no, sino a que te sientas cómodo con esta persona. Esto te hace libre de hablar y proponer. Aquí hay una diferencia importante, en ceder y querer. Cuando no hay ese 'click' quizá tu pareja te proponga hacer algo y tú cedas, pero no quieres. En este caso, lo haces porque comparten el deseo.

Claro está, hubo alguien que dijo “no, a mí no me ha pasado”, pues se “moldea” a la pareja para cumplir con sus exigencias. Si le preguntamos a los científicos dirán que este 'click' se da por el olor del sexo opuesto, porque la mujer está ovulando, por el tamaño de las caderas o el torso y un poco de explicaciones más.

Yo lo único que diré es La culpa es de las hormonas. Si te ha pasado a ti, deja un comentario.